El Pensamiento Creativo de la Juventud Mexicana: Un gran reto

La organización para la cooperación del desarrollo económico(OCDE) Publicó los resultados de la prueba PISA que se aplicó en el año 2022 en pensamiento creativo, dando como resultado que México queda por debajo del promedio de los países que son miembros de esta organización, obteniendo como resultado 29 frente al promedio que es de 33. Aún así, este resultado posiciona a México, como el segundo mejor de Latinoamérica, quedando por debajo de Chile. Éste desempeño refleja una singularidad: aunque la creatividad de los jóvenes mexicanos muestra un potencial significativo en la región, aún continuamos enfrentando retos considerables en comparación a los estándares globales.

Pensar creativamente es la capacidad de idear cosas nuevas, relacionar conocimientos de manera innovadora para apartarse de los esquemas habituales de pensamiento. el proceso creativo implica el uso de la razón y sobretodo la pasión para ver la realidad desde perspectivas diferentes, y así permitir a la invención, la creación y el emprendimiento con originalidad. El proceso creativo, como modelo, al dividirse en cinco etapas como la preparación, la incubación, el descubrimiento, la evaluación y elaboración; subraya la complejidad y riqueza del pensamiento creativo.

En cada una de estas etapas, las personas combinamos conocimientos previos con nuevas experiencias y así cultivamos ideas originales y soluciones realmente innovadoras.

El resultado presentado en este año por la prueba PISA que se aplicó en 2022, causa ruido, específicamente el pensamiento creativo, y esto genera preocupación en distintos sectores, especialmente en el ámbito empresarial de Puerto Vallarta y de la República mexicana, en general. La prueba PISA es una referencia mundial que evalúa la preparación de las niñas niños y adolescentes estudiantes para enfrentar los desafíos contemporáneos, y nos proporciona datos comparativos que son útiles de los países. Estos resultados no sólo reflejan el estado actual del aprendizaje de nuestros educandos, sino también vienen a influir en las decisiones políticas y educativas para buscar mejorar la calidad de la educación y la capacidad de innovación para las futuras generaciones.

En México, para el sector empresarial es preocupante. La creatividad no sólo es un atributo deseable, sino una necesidad en un mundo que cada vez vez hay más complejidad y estamos más globalizados. Las empresas requerimos personas capaces de generar soluciones novedosas y que sean adaptables de forma rápida a cambios inesperados. Sin embargo, los resultados de la prueba PISA nos indican que los jóvenes mexicanos tienen un largo camino por recorrer con la finalidad de alcanzar los niveles de creatividad de los países más avanzados.

Para atender esta situación, será importante y fundamental que tanto padres de familia, académicos y los mismos estudiantes trabajen en conjunto para fomentar el desarrollo del pensamiento creativo.

1)        Fomento del entorno creativo tanto en el hogar como en la escuela. Tanto padres de familia, como maestros deberán crear ambientes que estimulan a la curiosidad y sobretodo a la exploración. Esto debe incluir proporcionar acceso a materiales variados, incentivar el juego libre y las actividades artísticas. También, permitir que los niños y niñas cometan errores sin temor a ser penalizados.

2)        Incorporación de metodologías activas en los planes académicos. Las academias deberán adoptar metodologías pedagógicas que promuevan el aprendizaje activo y más importante la resolución de problemas. Importante que el aprendizaje se base en proyectos, que sea cooperativo y se enfoque en habilidades de este siglo que puedan ser efectivas para desarrollar la creatividad.

3)        Habilidades socio emocionales. Es importante fomentar habilidades como la empatía, la autoconciencia y el manejo adecuado de las emociones, esto realmente es esencial. Ya que permitirán a los jóvenes manejar el estrés y colaborar con otras personas para así perseverar ante los desafíos, lo cual es importante para el pensamiento creativo.

4)        Diversidad en experiencias y culturas. Exponer a las niñas, niños y adolescentes, a diferentes culturas, ideas y experiencias para poder ampliar sus perspectivas y enriquecer su pensamiento creativo. Esto es posible a través de viajes constantes, intercambios culturales, talleres de literatura, diversa y participación en actividades comunitarias.

5)        El fomento a la reflexión. Enseñar a los jóvenes niños y niñas a reflexionar sobre su propio proceso de pensamiento y evaluar sus ideas, de manera crítica que puedan así mejorar significativamente su capacidad creativa.

Potenciar el pensamiento creativo en la juventud mexicana será una gran tarea que va a requerir de un esfuerzo coordinado y sostenido de todos los sectores de la sociedad. En colaboración, entre padres de familia, académicos y estudiantes. Se podrían crear las condiciones indispensables para que nuestros jóvenes se desarrollan plenamente en búsqueda de alcanzar su potencial creativo, enfrentando así, y con éxito los desafíos del mundo actual para contribuir al progreso de México.

Francisco Gabriel Vizcaíno